mitos y leyendas implantes dentales

Muchas veces los pacientes temen usar implantes dentales porque creen en mitos en torno a ellos, como por ejemplo que se trata de un proceso doloroso o que no pueden ser usados por las personas alérgicas. 

Afortunadamente, hemos desmentido estas falsas creencias para orientarte sobre la colocación de injertos dentales

Falsas creencias sobre los implantes dentales 

Estas son las leyendas asociadas a la colocación de implantes.

Colocar los implantes es un proceso doloroso

Esta premisa es totalmente falsa porque utilizamos anestesia local para evitar la mínima molestia o sensación dolorosa, es decir, el esmalte queda totalmente dormido.  

En caso de sentir ansiedad, contamos con sedación total consciente, que te permite estar relajado durante la intervención dental.  

Después del tratamiento, te entregamos una lista de cuidados que debes aplicar para garantizar una cicatrización óptima. 

No pueden usarlos los pacientes con poco hueso dental

Gracias al mejoramiento de la tecnología dental, podemos colocar los implantes en las personas con poca anchura y altura del hueso maxilar.

Disponemos de microimplantes dentales más pequeños para introducirlos en los espacios de poca base ósea. 

En caso de ser necesario, extraemos injertos óseos de la propia boca del paciente para reforzar el material sintético que vamos a colocar durante la intervención. 

También aplicamos técnicas para regenerar la dentadura en la que van las piezas. 

Causan reacciones alérgicas

Utilizamos injertos fabricados con materiales biocompatibles con los tejidos humanos para evitar alergias. 

En el mundo de la odontología profesional, sabemos que los implantes no producen rechazo. 

De hecho, lo que se puede presentar en el 2,5? los casos es la oseointegración del implante fallida porque el paciente no ha seguido las indicaciones postoperatorias. 

No necesitan cuidado

Esta creencia está totalmente alejada de la realidad. Los implantes dentales al igual que los dientes naturales necesitan de adecuadas prácticas de higiene bucal en procura de su mantenimiento.  

En caso contrario, la falta de limpieza o un cepillado inadecuado pueden causar la acumulación de sarro dental, la formación de periodontitis y la caída de las piezas dentales. 

Este mito también está asociado con otro, pensar que los injertos van a durar toda la vida. Aunque estos implantes están hechos con materiales cada vez más resistentes y durables, esto no garantiza su permanencia.

Es necesario cumplir con los hábitos diarios de higiene y con las visitas anuales o semestrales al odontólogo para revisar el estado de tus dientes e implantes.